Las puertas automáticas son en la actualidad un elemento indispensable en establecimientos y espacios de cualquier índole, ya sean edificios destinados a usos comerciales, restaurantes, complejos residenciales o incluso farmacias. No cabe duda que este tipo de productos y sistemas aportan grandes ventajas y su funcionalidad mejora la eficiencia del lugar en el que se instalan. Este tipo de puertas también conlleva ciertos inconvenientes ya que, aunque realicemos un correcto mantenimiento del producto, en ocasiones pueden surgir averías imprevistas, que interrumpen el funcionamiento de la puerta automática.

¿Cómo podemos actuar frente a estas averías? Y sobre todo, ¿de qué manera podemos como usuario o empresa prevenir fallos en las puertas automáticas? Desde Dintelar te damos las claves para responder a ambas cuestiones.

Errores más comunes de las puertas automáticas

Las principales causas de averías de puertas automáticas suelen estar asociadas con sus sensores de movimiento. Estos son los encargados de accionar la apertura de la puerta y permitir o denegar el acceso al usuario, lo que hace que sean unos de los elementos fundamentales de dicha puerta. 

Al igual que ocurre con el resto de dispositivos y mecanismos con elementos electrónicos, pueden detectarse fallos en la motorización. Cuando esto ocurre, la puerta no detecta la presencia del individuo y por consiguiente no se abre. Dicho esto, es conveniente contactar de inmediato con el servicio técnico ya que lo más probable es que se trate de un problema informático y que pueda solventar mediante la reprogramación del sistema. 

En otros casos, un fallo en este sistema puede hacer que la puerta se abra o cierre de manera independiente, o bien lo haga a una velocidad demasiado rápida o lenta. Esto puede ocurrir por tres motivos principales: el mecanismo está bloqueado, algún elemento no está bien ajustado o el motor no tiene fuerza para mover las hojas de vidrio. Aunque este tipo de averías suelen estar también relacionadas con la motorización, quizás este no es el foco del problema, por lo que es muy importante que un profesional experimentado revise personalmente la puerta automática en su conjunto y determine cuál es el problema exacto, a fin de resolver la incidencia de la forma más eficiente posible. 

No todas las averías están ligadas a la parte informática o motorizada de una puerta automática. Es muy común que se produzcan roturas o fracturas parciales o totales de alguna de las hojas de dicha puerta. En estos casos recomendamos de nuevo que contactes con el servicio técnico, para que puedan personarse de inmediato al lugar en el que se encuentre la puerta automática y puedan solventar el fallo mediante la sustitución de la pieza.

Recomendaciones de uso de las puertas automáticas 

Aunque las puertas automáticas presentan en ocasiones fallos inevitables, la mejor manera de prevenirlos es realizar un uso correcto de la puerta y un consiguiente mantenimiento. En este sentido se pueden determinar tres aspectos clave a tener en cuenta, como pautas para mantener las puertas en buen estado:

  1. Utilizar de manera adecuada la puerta. Cualquier uso inadecuado, entendido como tal cualquiera que se aleje de los fines para los que está diseñada la puerta, puede conllevar fallos en el sistema. Nos referimos a, por ejemplo, mantener abierta la puerta de forma manual, impedir su movimiento, golpearla o cualquier acción que fuerce el sistema. La mejor manera de conseguir la eficiencia del producto es emplearlo según su cometido. 
  2. Realizar una limpieza periódica de la puerta. Tanto las hojas como el vidrio o cualquier otro elemento de la puerta deben limpiarse de manera regular, de forma que pueda eliminarse cualquier partícula que interrumpa el correcto funcionamiento de la puerta. Esta limpieza ha de realizarse de manera exhaustiva, por lo que te sugerimos que contrates a un profesional.
  3. Contactar con el servicio técnico ante cualquier duda. Cuando se detecte un desperfecto es necesario acudir inmediatamente al fabricante. Los profesionales generarán una incidencia y, si la situación lo permite, resolverán el problema de manera remota. Si no fuera posible hacerlo a través de este medio, un técnico se desplazará hasta el lugar indicado para examinar la puerta y resolver el problema con ayuda del material necesario.

En definitiva, para mantener correctamente las puertas automáticas y conseguir los mejores resultados derivados de su funcionamiento es crucial realizar revisiones periódicas del producto. De esta manera los técnicos podrán prevenir incidencias graves o irreparables y alargar la vida útil de la puerta automática. Contacta con el servicio técnico de Dintelar para agendar una cita con uno de nuestros profesionales, los cuales se encargarán de mantener tu puerta para que puedas obtener el máximo rendimiento.