La sostenibilidad se ha convertido en uno de los grandes focos de atención de las compañías que, ahora más que nunca, desean preservar un estándar de responsabilidad social corporativa de cara a ofrecer servicios o productos basados en el cuidado del medio ambiente. Es, por ello, que la instalación de puertas automáticas se valora como una alternativa de ahorro y eficiencia energética que sigue los parámetros de sostenibilidad mencionados. A continuación, te explicamos cuáles son los beneficios de su instalación y el mantenimiento de sus sistemas electrónicos, especialmente en invierno.

1. Mantienen la temperatura del interior

Una de las principales ventajas de las puertas automáticas en invierno es evitar que el calor o el frío se propaguen hacia el exterior del edificio. Este hecho permite que una estancia, en particular, o un local, en general, mantengan su temperatura a un nivel estable y climatizado que garantice el bienestar de las personas que se encuentran en su interior. De esta forma, se evitarán los cambios bruscos de nivel del clima hacia el frío o hacia al calor gracias al cierre hermético de las puertas automáticas cuando no detectan la presencia de una persona. Esto es realmente útil en cualquier época del año, pero sobre todo en invierno y en verano.

2. Ahorran energía eléctrica

Las puertas automáticas son habituales en locales como supermercados, hoteles, centros comerciales u oficinas ya que permiten la máxima velocidad de apertura y cierre gracias a su sensor de movimiento para identificar el tránsito de personas. Por ello, son ideales para facilitar una circulación intensa, manteniendo un consumo energético bajo. El ahorro de energía es un factor importante a la hora de elegir el mecanismo de la entrada de un local y dichas puertas automáticas garantizan el ahorro de energía, gracias a la contención de temperatura.

3. Permiten la integración visual

Gracias al sistema de máxima seguridad y a las amplias posibilidades de adaptación que poseen los productos ofrecidos por Dintelar, las puertas automáticas se convierten en las mejores aliadas para un funcionamiento garantizado. Además, estas puertas están especialmente diseñadas para ser integradas en cualquier conjunto arquitectónico, favoreciendo así el menor impacto visual y la mayor armonía estética en la fachada del edificio.

Mantenimiento de las puertas automáticas en invierno

Es conveniente saber que las temperaturas bajas afectan a los accesorios y mecanismos de las puertas automáticas, como son los motores, las fotocélulas o los cuadros de maniobra. En este sentido, el frío provoca que estos automatismos reaccionen de una forma más lenta de lo que suelen hacer ya que el aceite que fluye por su interior se vuelve más denso y, por ello, el motor requiere de más potencia para movilizarlo.

En este sentido, debemos poner especial atención en invierno para llevar a cabo un correcto mantenimiento de las puertas automáticas y comprobar que no hay filtraciones y, así, evitar posibles averías técnicas. Sin embargo, si hubiera algún fallo en la puerta automática, en Dintelar estaremos encantados de atender todas las consultas que surjan para garantizar un funcionamiento óptimo desde nuestro asesoramiento personalizado.